sábado, 27 de noviembre de 2010

LA NAVIDAD, EPOCA DE UNION Y DE PAZ, FELICES FIESTAS...

EN BOGOTÁ RECORRE ‘LA RUTA DE LA FANTASÍA’


 “Era la navidad del año 2006 en Bogotá…un legendario rey, hombre poderoso y noble, pensaba cómo hacer para que su reino viviera en paz, pues uno de los vigías de las torres del castillo le avisó que los Caballeros de la Tierra del Fuego se disponían a atacar”… Así empieza el cuento de la Navidad que este fin de año recrea la vida de los capitalinos.
La historia es narrada en los cuatro epicentros que hacen la historia de ‘La ruta de la fantasía’: Plaza de Bolívar, Plaza de Usaquén, Parque Simón Bolívar y Parque El Tunal. Cada lugar está diferenciado por los personajes de este cuento como El rey, la dama, la princesa, el mago, el caballero, el chin y el chan (dos dragones que brillan de noche, encargados de proteger el Reino de la paz).
En cada punto durante el mes de diciembre se cumplen actividades y representaciones con personajes del cuento capitalino, que son distribuidos a sus habitantes.
Además la iluminación comprende otros 65 puntos entre vías y plazas de la ciudad, como la Iglesia del 20 de julio, la Plaza de banderas, Ciudad Montes, el edificio de Codensa, Engativá, Fontibón, las glorietas de la avenida 68 y calle 100, los parques El virrey, Nacional, Timiza, Suba, Usme y la zona T, entre otras.
Especial decoración tiene el Cerro de Monserrate, en el que han sido instalados 9.000 bombillos, 4.000 estrellas, 30 reflectores de 400 vatios, 10.000 metros de manguera luminosa y más de 60 figuras navideñas.
El alumbrado navideño de Bogotá estuvo a cargo de la Alcaldía Distrital, Codensa, la Empresa de Energía de Bogotá y la empresa privada.

jueves, 25 de noviembre de 2010

LA LEY MARÍA, UN BENEFICIO PARA PAPÁ Y MAMÁ EN COLOMBIA

LA LEY MARÍA, UN BENEFICIO PARA PAPÁ Y MAMÁ



Los padres gozan de una licencia remunerada para compartir con su bebé. Hace un par de años se cuestionó su nombre, pues una Ley se conoce a través de un número. Sin embargo, ‘María’ ganó la batalla.
El 12 de julio de 2001 nació la pequeña María y con ella, una Ley que les permite a los padres estar con sus bebés los primeros días de vida en cambio de alegar ‘calamidad doméstica’ para obtener esta licencia, como usualmente se hacía.

EL DERECHO AL CARIÑO

María es la hija de Juan Lozano, actual Ministro de Medio Ambiente, Vivienda y Desarrollo, y la inspiración de una norma que hoy les otorga ocho días a los hombres para involucrarse en el cuidado, alimentación y atención del pequeño ser desde su arribo al mundo.
“La Ley surge de la mortificación que me produjo al día siguiente del nacimiento de María tener que trabajar o declararme en calamidad, cuando lo que estaba era celebrando un evento jubiloso. Pensé que se quebrantaba el derecho fundamental de la niña de recibir cariño, afecto, ternura, tener la compañía de su padre y que, además, se generaba una vulnerabilidad especial para la madre, quedándose sola. Ese mismo día tomé la decisión de promover la ley”, afirma el Ministro.
El entonces presidente de la República, Andrés Pastrana, la sancionó en el primer semestre de 2002. A partir de su promulgación, ha tenido una serie de modificaciones, pues algunas de sus disposiciones iníciales transgredían derechos fundamentales.
Ahora, el padre tiene derecho a ocho días hábiles de licencia remunerada de paternidad, no importa si solo cotiza él y no su esposa. Esta modificación se realizó en los primeros meses del 2009.
Se derogó la exigencia de mínimo dos años de convivencia en pareja para que el padre tuviera derecho a los ocho días, gracias a una sentencia de la Corte en el 2003. El otorgamiento no dependerá del tiempo de unión.
Tampoco se descontarán de los 84 días de licencia de maternidad los ocho del padre, como al comienzo se estipuló. Cada quien gozará de su licencia remunerada de manera individual y será la EPS quien la pague. “La licencia es para el amor, para la ternura. Los estudios demuestran que el papá que cargó a su bebé recién nacido, lo abrazó y le dio amor en las primeras horas, muy rara vez se convierte en un padre maltratador. Ese contacto con el recién nacido genera un control interno frente al maltrato infantil; es como si se produjera un toque mágico que contiene impulsos violentos”, afirma el Ministro Juan Lozano.

Otros aspectos legales
·         No se debe confundir con una licencia de calamidad doméstica.
·         El único soporte válido para el otorgamiento de licencia es el Registro Civil de Nacimiento, el cual debe presentarse a la EPS a más tardar dentro de los 30 días siguientes a la fecha del nacimiento del bebé.
·         La licencia remunerada estará a cargo de la EPS, para lo cual se requerirá que el padre haya estado cotizando durante las cien (100) semanas previas al reconocimiento de la licencia.
Derechos inviolables
Los padres pueden acudir a la tutela para obtener su permiso remunerado, porque está de por medio un derecho fundamental. En la Corte Constitucional hay varias tutelas por incumplimiento de la Ley 755 o Ley María.
Dos sentencias determinaron que hay violación de los derechos de los niños, por lo que fallaron a favor de los padres, dejando precedente para otros casos similares.
En la sentencia T 709 de 2003, la Corte Constitucional aclara que el hecho de que los padres no estén afiliados a la misma EPS no es un argumento para negar los ocho días de licencia. “La filosofía que orienta esa licencia no es otra que la protección de la niñez en Colombia y el desarrollo del derecho constitucional de los menores al amor y al cuidado de sus dos progenitores, no sólo de uno de ellos”, según la Corte Constitucional en su fallo.
En sentencia T-298 de 2004, el alto tribunal falla a favor de un ciudadano que interpuso una acción de tutela alegando el derecho al beneficio consagrado en la ley María tras haber adoptado a un bebé. Sin embargo, la EPS negó afirmando que no existía norma alguna que autorizara el reembolso de licencia de paternidad por adopción.
La Corte dice: “No resulta admisible que de plano se rechace el carácter fundamental de un derecho por su carácter prestacional”.
En la sentencia también se menciona que no puede limitarse la extensión de la licencia únicamente al padre biológico. El núcleo esencial de este derecho no admite distinciones basadas en la forma de nacimiento, pues el cuidado y el amor se requieren sin importar si es biológico o afectivo, razón por la cual la ley tuvo un trato discriminatorio al respecto.
En conclusión, el padre de un hijo adoptivo sí tiene derecho a su licencia de paternidad, con las mismas condiciones que tienen los padres biológicos cuando nace su bebé.

LA REINSERCIÓN SOCIAL, UNA SOLUCIÓN EN LA QUE INTERVENIMOS TODOS.

Programas sociales y atención psicosocial a reinsertados: argumentos básicos sobre esta relación.
Autores: Marco Turbay, Jean D. Polo y Leonardo Celis

Cuando hablamos de un programa que aglutina diferentes proyectos que apuntan a un fortalecimiento social de un grupo humano como los reinsertados, debemos dejar claro algunos argumentos. Estos serán desarrollados a continuación presentando una breve definición de lo que para las ciencias sociales y humanas, en particular desde la psicología, representan los reinsertados. Luego, presentaremos las razones por las cuales consideramos la atención psicosocial como un eje articulador capaz de potenciar los alcances de todo tipo de proyecto.
Como primera medida, cuando hablamos de temas que involucran grupos humanos nos queda la tarea cultural, de dar cuenta de la redefinición de los actores sociales, que en este caso, al margen de la ley, son la base de nuestro trabajo. Conocemos como ciudadanos las consecuencias funestas que trae a la vida cotidiana la opción armada por parte de quienes deciden tomar este camino: viudas, huérfanos, fisuras profundas en el tejido social, crisis de valores sociales, culturales y patrióticos, desesperanza, desmotivación, sin sentido, entre muchos otros. Sin embargo, la labor como interventores sociales, que siempre debe estar avalada por procesos investigativos, se hace compleja a la hora de hablar de un grupo social como los reinsertados en relación a un grupo de ciudadanos que ocupan el puesto de víctimas.
De esta manera, nuestro sentido común se convierte en una barrera que nos impide percibir el resto de elementos del entorno que condicionan, mas no determinan, algunos de los comportamientos de los reinsertados, injustificables bajo todo punto de vista tales como secuestro, atentados, entre otros. De todos modos, no podemos decir, como científicos sociales que estos actos agresivos no tengan un fin, porque aunque no estemos de acuerdo, están insertados en programas, haciendo esto el hecho de que cumplan propósitos, aunque estos no los valoremos como morales. Esto indica que un acto violento no es producto únicamente de quien lo hace, sino del grupo al que pertenece, que representa el nombre de quien lo hace, como bien lo deja claro Rappaport.
Si hablamos de los reinsertados debemos reconocerlos como sujetos como usted y como yo, con dimensiones humanas que se interconectan y que de mantener un desequilibrio en ellas puede optar por un equilibrio constructivo o destructivo para sí y/o la sociedad: sea pertenecer a grupos al margen de la ley o lanzarse a edil de su contexto social, hacerse responsable de sus proyectos y procurar lograrlos o buscar su realización por los caminos más fáciles como el narcotráfico, entre otros ejemplos. Las dimensiones de las cuales hacemos referencia son la biológica, la cognitiva, la emocional, la socio cultural y la espiritual. Ejemplo: no tener satisfacción de la necesidad básica del alimento compromete la dimensión biológica, pero esto no obliga a robar o a no sentirse con la capacidad de autorrealizarse, pero son condicionamientos que pueden llevar la persona a tomar decisiones. Ahora, imprimamos a este caso un ambiente social que lo ha desestimado o que ha buscado reposar sobre sus hombros toda la responsabilidad del sostenimiento familiar. Así las decisiones no sólo se complican, sino que se pueden interpretar o comprender de mejor forma en nuestra sociedad; esto no implica justificarlas necesariamente ya que pensamos desde las ciencias sociales y humanas al ser humano como “creador de símbolos” como diría Cassirer, o desde otros enfoques “hacedor de su propia libertad en medio de sus aparentes determinismos”.

De este modo, el reinsertado es un ser humano que cumple dos posiciones de manera alterna y consecutiva. Alterna porque el hecho que sea lo uno no niega que sea lo otro, y consecutiva porque luego de ser una es la otra. Estas condiciones son las de victimario y víctima. Autores como Hanna Arendt (1999), hablan de un termino llamado “la banalidad del mal”, el cual consiste que ante situaciones limites aun las personas mas “decentes” son capaces de actos abominables; en muchos de estos jóvenes se puede haber presentado este fenómeno, el cual pudiese dar matices diversos a la comprensión que s de la violencia se tiene; esto es, de igual forma apoyado por psicólogos como Amalio Blanco (2005) el cual llama a esto la zona gris.
Victimarios en cuanto a que decidieron pertenecer a un grupo, y en consecuencia, sus representaciones sobre la vida civil se modificaron al punto de realizar actos agresivos que causaban dolor y coacción a otros grupos insertos directa o indirectamente en el conflicto armado como es los correspondientes a los civiles. Víctimas por dos elementos. Uno, referido directamente sobre la acción violenta cometida sobre otro grupo humano donde al poner entre paréntesis sus valores personales o sociales se acostumbran pasivamente a defender actos que individualmente estarían en desacuerdo. Y dos, existe una presión social que los hace pertenecer al grupo, y una debilidad individual que como otros no son capaces de confrontar poniendo en riesgo su vida por encima de sus temores: sus hijos, sus familias, sus casas, sus tierras, sus comodidades, sus tranquilidades, etc.

A esta presión social le agregaríamos el elemento que involucra el contexto nacional históricamente hablando: un estado débil que no da garantías de seguridad, ni laborales, educativas, económicas, de salud o de vivienda. Sus, representa desde su dimensión cognitiva y espiritual, dependiendo de los enfoques teóricos de la psicología, un matiz de motivación para tomar un camino constructivo o destructivo. Y, ¿quién no ha tomado caminos en esta vida de los cuales luego de la turba causan culpa y/o conciencia social de injusticia? Algunos de esos actos no pasan de ser para algunos tan “trascendentales” por cuanto a que se reducen a realizar una copia en una clase, o no pagar voluntariamente un artículo no cobrado, o volarse un semáforo, pero desde nuestra condición socio cultural estamos hablando de lo mismo. La moral no da paso a la injusticia por pequeña que esta sea. El reto para las ciencias sociales con la sociedad es identificar puntos comunes entre los reinsertados y cualquier ciudadano en nuestra condición humana, pero dar cuenta que somos responsables de nuestros actos; pero también, para evocar que nuestra condición humana al igual que la del reinsertado no es humana por cuanto a que comete errores, sino que podemos superarlos.
A continuación presentaremos los argumentos que presentan la necesidad de institucionalizar la atención psicosocial como eje articulador de los programas sociales. Esto no quiere decir que las Corporaciones, Fundaciones u Ong que laboran en nuestra región no lo integren, más no lo determinan como eje articulador, por la misma ausencia que este elemento tiene en la ley.
Desde el punto de vista de la conveniencia apoyar a los diversos programas existentes para lograr la resocialización de los grupos ha sido hasta ahora en los programas de intervención social un espacio donde el aporte disciplinario mas no interdisciplinario la convierte sus propósitos en diversos cronogramas con diversas e inconexas actividades que sin orientación para el actor social (pobre, desplazado, condenado, etc) pierde la posibilidad éste de identificarse con un proyecto de Nación, dejando este vacío un impacto pobre, y en consecuencia un fracaso en los propósitos constitucionales.
Respecto a la importancia teórica, indica esto la manera cómo la psicología desde las ciencias sociales humanas aporta a la definición del reinsertado u otro grupo social al que interviene, ayudando en esto a definir y/o orientar programas eficientes y eficaces. La atención psicosocial como eje articulador permitiría:
- Crear y fortalecer un auténtico espacio interdisciplinario donde se rescate al individuo como ser activo de un proceso de resocialización del cual es protagonista. La participación de diferentes disciplinas en un programa no garantiza la interdisciplinariedad, y si esta metodología puede redireccionar los esfuerzos que en cada una se hacen. La idea es encontrar en el fenómeno social de la reinserción un propósito de unión, y no en cada disciplina una mejor o distinta forma de lograrlo.
- Implementar y actualizar los modelos actuales de reflexión sobre el tema. Las teorías son caminos de facilitación de la construcción de programas con eficiencia y eficacia. La meta es cualificar los programas existentes en términos disciplinarios y profesionales con el propósitos que las teorías y metodologías contemporáneas y propias al contexto sean las que orienten y definan las pautas de intervención. Para citar ejemplos latinoamericanos, Freire, Martin-Baró, Montero, Barbero, Borda. Para citar modelos europeos como los de escuela de Frackfort. Para citar modelos indú Amartya Sean, entre otros.
- Fomentar las estrategias propias de un estado social de derecho en cada organismo conducente a la movilización de la reinserción. Los operarios actuales participan y son representantes de un estado, no de un gobierno; como bien se sabe la mirada del Estado actual fomenta una participación proactiva de sus actores principales, los ciudadanos. De esta manera, se sugiere implementar un proceso de seguimiento y capacitación simultanea de actividades y estrategias específicas que garanticen el funcionamiento de dicho programa en función a lo que la comunidad de reinsertados le significará valorarse como protagónica en los cambios sociales que demande.
Las implicaciones prácticas de este eje articulador facilitaría la sostenibilidad de los procesos productivos. Una persona en estado de crisis no articula ningún motivo. A la premisa clásica de la psicología clínica En situaciones anormales es normal un comportamiento anormal, muestra que de no incluirse el elemento psicosocial como eje articulador afectará ineludiblemente el desempeño, interés y motivación en la participación de otros programas y escenarios sociales. Alternamente, promovería, en consecuencia de lo anterior, una imagen reconstructora del reinsertado en la comunidad civil.
Las implicaciones metodológicas que tendría tal inclusión como base articularía los programas diversos en función a definir hechos, factores o causas de la reinserción de manera transversal, pudiendo así conocer la manera cómo un factor puede afectar el funcionamiento de otros, y así conocer la manera cómo deben ser construidos los proyectos que los conforman. También fomentaría la recuperación histórica, la movilización popular y la recuperación de clases en función a otorgar canales de poder comunicativa que permitan en una constante actualización de sus estados psicosociales realizar pertinentes y oportunas intervenciones en el beneficio de la sociedad civil y la comunidad de reinsetados.

Y por último, el impacto cultural que dicho eje reconstruiría los significados y las representaciones sociales que los reinsertados tienen sobre su desempeño como ciudadanos. A su vez, reconstruiría también las representaciones sociales que sobre los reinsertados tiene la sociedad civil. Y resocializaría la vida productiva de los reinsertados en términos culturales, sociales, económicos, entre otros.
La tarea es de todos. Las instituciones que laboran con estos grupos poblacionales de manera directa hacen su parte, pero nosotros como sociedad civil tenemos la mayor partida desde involucrándonos en los fenómenos, hasta aceptando estos nuevos lazos históricos que se nos presentan a las culturales receptoras de este fenómeno social. Es hora que la desmemorización cultural deje hacer parte de nuestras características socio culturales, y pase a ser la integración social una estrategia constructiva en donde el perdón hacia los reinsertados se materialice de parte de ellos como compromiso social con la comunidad. Perdonar no es olvidar, es aceptar y comprometerse a utilizar otras formas distintas de negociación.

sábado, 20 de noviembre de 2010

LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA, PUNTO DE REFERENCIA DE NUESTRA SOCIEDAD.


UN ENFOQUE DIRECTO Y EXCLUSIVO HACIA LA LEY DE INFANCIA Y ADOLESCENCIA COLOMBIANA.

El enfoque de este ensayo  es hacia la niñez y adolescencia de nuestro país, el tratamiento legal, estatal, económico, social, político, familiar, psicológico, medico y demás disciplinas, las cuales se les aplica a esta parte tan importante que conforma a la sociedad y del cual en sus manos depende el futuro de nuestro país.
Para iniciar el presente ensayo, deseo plantear el siguiente interrogante: ¿Para el tratamiento de las conductas  punibles realizadas por niños o jóvenes, la aplicación del Código de Infancia y adolescencia, es la plena solución eficaz y justa para sancionar, reeducar y resocializar al menor? ¿Es este el modelo adecuado para aplicar o es necesaria una complementación?
Es importante señalar que este tipo de conductas típicas es importante tratarlas desde su origen y con el tratamiento adecuado para evitar que se formen delincuentes en potencia.
Bajo los conceptos expuestos por la Dra. Inés Yohanna Pinzón, estoy totalmente de acuerdo ya que el trato que se les den a estos menores, se debe hacer bajo la legislación de la Convención de los derechos del niño, las reglas mínimas de la ONU para la administración de justicia de menores (reglas de Beijín), las directrices de la ONU para la prevención de la delincuencia de menores, la Doctrina de protección integral y la Constitución Nacional de 1991.
Considero que las conductas típicas de algunos menores que infringen la ley y la vulneración a sus derechos, es causado por el dinamismo de la sociedad basados en los siguientes factores: abandono, tortura, pobreza, todo tipo de maltrato hacia el menor, el espacio socio-económico y socio-cultural, desaparición forzada, detención arbitraria, prostitución, desaparición forzada, violencia intrafamiliar, trabajo infantil, creación de grupos delictivos como pandillas y grupos armados, sicariato, minas antipersonales, enfermedades de transmisión sexual, violación sexual, alcoholismo, drogadicción, esclavitud, secuestro, trata, mendicidad, entre otros.
A mi concepto debe haber  mayor participación tanto del Estado, la sociedad y la familia de los menores, para prevenir y combatir conductas que cometan estos menores y de igual forma las que se cometen en contra de ellos. Porque la atención hacia ellos ha ido decayendo y me pregunto: ¿Estamos aportando lo suficiente para prevenir o mejorar la situación de nuestros niños y jóvenes?
En primer lugar esta situación hay que tratarla desde el núcleo familiar y si allí se observa la garantía plena de la protección de sus derechos y si se le ofrece plena armonía para lograr la convivencia y desarrollo de niños y jóvenes; también si el Estado ofrece garantías para el ejercicio de derechos y libertades así como su restablecimiento.
Tal como lo expresó la Doctora Yohanna Pinzón, los principios orientadores de la Ley de  Infancia y adolescencia son:  la protección integral, el interés superior del niño, la prevalencia de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, la corresponsabilidad, la exigibilidad de derechos, la perspectiva de género y la responsabilidad parental.
Se menciona también y considero que es muy importante la clasificación en grupos de los derechos de los niños y adolescentes y el reconocimiento, la aplicabilidad, defensa y garantía de los mismos, tales como: derecho a la vida y a la supervivencia, derechos al desarrollo, derechos a la participación, derechos a la protección los cuales se deben reconocer, proteger y garantizar por todos, y quienes somos todos: me refiero a la corresponsalidad de la familia, estado y sociedad.
Son claras las obligaciones del Estado Colombiano para con los niños y adolescentes, obligaciones las cuales pienso y solicito se apliquen con mayor intensidad, y que corresponden a: inicialmente garantizar, seguido de atender, asegurar, promover, posteriormente fomentar, prevenir y finalmente erradicar.
De igual forma con mayor aplicabilidad las obligaciones de la familia, las cuales son: ofrecer amor, formación y promoción para los niños y adolescentes.
Y para finalizar también deseo exponer las obligaciones de las Instituciones educativas, como son: conocer, respetar y promover los derechos y garantías de los niños y adolescentes.









sábado, 13 de noviembre de 2010

LA GLOBALIZACION

GLOBALIZACIÓN + CRISIS = OPORTUNIDAD O RUINA.




 
¿Te ha parecido interesante la noticia? No
Accede a tu cuenta España era una de los países que mejor consiguió establecer empresas que crecieron rápido con la bonanza económica y que, las que consiguieron mantenerse, han podido ver aspectos de cambio, adaptación e incluso crecimiento importante en otros países del mundo.

Cada vez más se ve que las empresas que en su momento apostaron por hacer los deberes en el mercado internacional tienen algunas salidas mejores que en España, ya que los países emergentes están abriendo oportunidades a aquellos que supieron hacer bien las cosas.
El factor globalización trae consigo además una serie de formulas de entender la gestión de compañías que empieza a ganar importancia (y preocupación) en muchos ámbitos empresariales de España. Una de estas formulas es la internalización de las compañías y su capacidad de automatización de procesos, otra, es la de la adaptación al cambio, con la consiguiente necesidad de las empresas de hacer entender al ámbito laboral este punto y el rechazo tan tremendo que existe por parte de la gran masa laboral al cambio, que es absolutamente vital para la supervivencia de las compañías y/o la mayoría de los puestos de trabajo.
La necesidad de visión global de las compañías tanto desde el punto de vista de la dirección como de la ejecución y gestión está haciendo que los que tienen la capacidad de avanzar en esta línea se separen de una forma cada vez más rápida de los que se quedan atrás y les cuesta más verla.
En muchos de los principales núcleos o colectivos de ámbito empresarial empiezan a recibir  por parte de sus empresas "inputs" entre los que se encuentran factores de competencia, que les son imposibles de abordar o incluso imposibles de entender en muchos casos, y a esto, se le suma una situación coyuntural del mundo (excluyendo a España) y es que en muchos otros países la lucha por el talento con estas capacidades es absolutamente abierta, mientras que en España se sigue pensando aún en el menor coste del talento (esto puede ser una excelente pauta para alguien con mentalidad inversora pero siempre que tenga visión global, si no, es lo mismo que tener el talento en un pozo), siendo el resultado final que empieza a haber una fuga de talento del país a otras latitudes en las que tanto el crecimiento profesional como las oportunidades de generar ingresos son mucho mejores, con más recorrido y en los que tanto la experiencia personal como la experiencia/país son valores muy bien calificados.
EL MOVIMIENTO ECONÓMICO ES GLOBAL, CADA VEZ MENOS LOCAL
El movimiento económico que se está generando es absolutamente global, algunos países se empiezan a convertir en absolutos demandantes de know how, talento y sistemas que provengan de países donde se vio que las cosas funcionaron, los profesionales españoles son jugadores activos en este caso, y la visión mundial tiene una tendencia a generar muchísima más demanda de estos factores.
Desde Padre Rico, tenemos acceso a lo que ocurre en más de 90 países, con actores y jugadores más o menos activos y relevantes de cada país y la visión es absolutamente demoledora para España, en cinco años es muy posible que haya cambiado de una forma que no sea muy reconocible (al menos si sigue en esta línea), el volumen tan enorme de masa desatalentada será espectacular y se convertirán en mano de obra cada vez más barata al servicio de muchos que han sido considerados durante muchos años en segunda línea.
LAS EMPRESAS QUE NEGOCIAN EN BASE A SU POSICIÓN ESTÁN MUERTAS.
Hay muchas empresas que han conseguido salir adelante durante estos años de atrás por el esfuerzo de un equipo, o de un líder, sin embargo, los cambios se están produciendo de una forma tan rápida, que las empresas que no se suben de una alguna forma a este cambio se quedan descolgadas y empiezan a vivir de lo que han hecho hasta ahora, pero la inercia que hoy en día genera el factor del pasado es cada vez más pequeña, por ello, la masa empresarial (principalmente Pymes) necesitan empezar a entender el factor interés, y dejar de negociar en base a posición, ya que ese enfoque es algo que se tenderá a dejar de lado, principalmente por la pérdida de tiempo que supone para alguna de las partes de la negociación, y las opciones tan rápidas de seleccionar otras posibilidades alternativas en las negociaciones, además el tiempo se va a convertir de una forma mucho más patente en un preciado tesoro en todos los ámbitos, tanto profesionales como personales.